Bastones para caminata nórdica

¿Estás buscando dónde comprar los mejores bastones de marcha nórdica? Tranquil@, estás en el lugar indicado, aquí te vamos a presentar la mejor guía de compra tanto para PRINCIPIANTES, como para AVANZADOS

Al momento de buscar bastones para practicar nordic walking, hay que tener en cuenta varios factores como son: la estabilidad y la flexibilidad. Los bastones de caminata deberán aguantar largas sesiones de entrenamiento, así como grandes cargas, ya que durante las salidas además de nuestro peso, también deberán soportar el de las mochilas; así que sigue nuestros consejos para elegir el que más te conviene.

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¿Cómo elegir el mejor bastón?

Lo ideal al momento de elegir tu bastón de marcha, conviene que no pese demasiado y si es posible que sea de una pieza, aunque también los hay plegables y que se pueden regular a la altura de cada persona

  • Los más comunes y económicos son de aluminio, su problema es que vibran más al tocar con el suelo. Estos son los mejores para principiantes.
  • Una buena opción intermedia son los de fibra de vidrio. No son tan ligeros como los de carbono, pero protegen tus articulaciones mejor que los de aluminio.
  • Los de fibra de carbono son los mejores. Son más livianos y casi no vibran. Los marchistas más expertos los usan en sus caminatas más largas.

Un detalle que nadie te cuenta, pero que puede aumentar un poco el precio del bastón es la facilidad con la que se desengancha de la dragonera (las cintas con las que los ajustas).

Bastones de marcha nórdica mejores y más baratos que los de Lidl, Decathlon o El Corte Inglés

Te presentamos la mejor selección que hemos podido encontrar de bastones para trekking o senderismo ya sean baratos de aluminio o para avanzados de carbono. Bastones plegables, rígidos, de marcas Leki, Fizan, Gabel o Forum… ¡los tenemos todos!

¿Cómo se usan los bastones de marcha nórdica?

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Cómo se utilizan correctamente los bastones de senderismo es una de las preguntas más típicas entre las personas que inician en este deporte, y para aprovechar los beneficios de la caminata y además garantizar un trabajo muscular seguro, debes aprender a realizar los movimientos correctamente.

No te preocupes, realmente el gesto que se realiza durante la práctica del nordic walking es muy natural, pero si además aprendes un poco de técnica, logras trabajar prácticamente todos los músculos del tren superior; ya que cuando aplicas la fuerza en los bastones para avanzar, acentúas el movimiento de los brazos.

5 consejos para usar bien tus bastones trekking

1. Al adelantar el brazo, adelanta también la pierna contraria.

Esto parece bastante evidente, pero usar los bastones con frecuencia puede afectar a tu coordinación. Intenta no pensar en que llevas bastones para que tu técnica sea lo más natural posible. Si pierdes la coordinación, suelta los brazos durante unos metros y luego regresa.

2. Clava el bastón en el centro. 

Los bastones se colocan justo en el centro de la marcha, con la punta hacia atrás, entre tus piernas. Esta es la mejor manera para que cumplan su función al usar los brazos para propulsarte.

3. Abre las manos al paso por la cadera

Al momento de plantar el bastón en el suelo, la mano tiene que estar muy firmemente agarrada a la empuñadura del mismo, para que el empuje sea más efectivo. Pero después de este impulso, los brazos regresan hacia atrás, mientras el cuerpo avanza hasta la altura donde clavaste el bastón; este es el momento de abrir totalmente la mano y soltarlo para extender el brazo hacia atrás. No te preocupes por que se te caiga, para eso están las correas que incorpora.

4. ¡Espalda recta!

De nuevo, olvídate de que llevas bastones. Mira hacia el frente para abrir el pecho y respirar con todo el espacio disponible en tus pulmones. Así, además de mejorar tu oxigenación en la sangre, liberas tensión en la espalda.

5. ¿Cómo se mueven los pies?

Los pies se mueven exactamente igual que lo hacen los marchistas olímpicos, dividiendo el movimiento en tres fases. Después de atacar el suelo con el talón, el pie se desarrolla hasta que el pulgar lo vuelve a impulsar. Realmente, los pies humanos están diseñados para que este sea el movimiento al caminar.